Descripción de la Beca:

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La Beca de 'Master in International Management for Global Leaders' de ESADE tiene como objetivo apoyar a personas calificadas que se caracterizan por sus sólidas habilidades de liderazgo, su deseo de proporcionar las mejores soluciones posibles y por tener un espíritu global, colaborativo y comprometido.

 

En mi ensayo a continuación, tuve que explicar lo que significa ser un buen líder y por qué sentía que el Máster de ESADE me ayudaría a desarrollarme como un mejor líder global en mi futuro profesional.

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Mi Ensayo

(escrito el 25 de enero de 2016)

 

Las organizaciones de hoy operan en un entorno global increíblemente interconectado, complejo y dinámico, lo que plantea numerosos desafíos para su líderes – como presiones financieras, presiones de la competencia, de la junta directiva, de los medios de comunicación, de los clientes, de los mercados globales, de la política y mucho más. Estos desafíos ejercen una enorme presión  sobre nuestros líderes y, en mi opinión, a veces incluso llevan a aquellos con buenas intenciones a desviar su enfoque de poner a las personas en primer lugar para centrarse principalmente en los resultados económicos. Creo que el entorno al que la gente está expuesta los moldea y moldea su comportamiento enormemente. Esta es la razón por la cual, en mi opinión, el liderazgo importa –los líderes ayudan a establecer la cultura dentro de sus organizaciones y sus discípulos se comportan de acuerdo con esa cultura, independientemente de su naturaleza.

 

Mi sentido de liderazgo se ha estado desarrollando desde mi infancia gracias a los entornos a los que he estado expuesto a lo largo de mi vida personal, académica, deportiva y profesional. El liderazgo, para mí personalmente, es una motivación interna, junto con características centradas en las personas, para influir a apoyar a otros con el fin de lograr un propósito común. No representa un rango jerárquico ni una posición que uno ocupa en una organización. Un gran líder no necesita un título ni una sensación de autoridad para liderar eficazmente, porque el verdadero liderazgo se trata de dar, no de tomar. Por lo tanto, a mi parecer, un gran líder es alguien genuinamente generoso; es alguien dispuesto a sacrificar ganancias personales para ayudar a que otros prosperen. Aunque las cualidades tradicionales de liderazgo como la inteligencia, la visión, la resiliencia y la determinación son, sin duda, muy valiosas para cualquier gran líder, estoy firmemente convencido de que son insuficientes por sí solas y deben ser reforzadas por otros atributos cruciales. Los grandes líderes poseen inteligencia emocional, lo que les ayuda a guiar su pensamiento, comportamiento y toma de decisiones con empatía hacia los demás. Realmente se preocupan por las vidas de sus discípulos como si fueran familia. Su propósito es inspirar a otros y fomentar el crecimiento y desarrollo personal, ayudando en última instancia a sus discípulos a convertirse en su mejor versión. Los grandes líderes se dedican a crear una cultura corporativa en la que cada individuo, desde el más junior hasta el ejecutivo de nivel C, se sienta valorado y respaldado. Creo firmemente que la responsabilidad de los grandes líderes supera al rendimiento empresarial; se centra en un compromiso profundo y auténtico con la vida de aquellos a quienes apoyan, las mismas personas cuyo talento, tiempo y energía ayudan a que el negocio prospere. La disposición para escuchar y reconocer la voz de cada individuo es un componente crucial de una gran cultura corporativa, ya que cada uno de ellos aporta un valioso conjunto de habilidades que se pueden fomentar aún más. Las pronunciadas habilidades de escucha de los grandes líderes se refuerzan con una comunicación perspicaz con el objetivo principal de empedrar a los personas en su camino hacia el éxito. La extensión de la confianza a sus discípulos, junto con el reconocimiento y aprecio de sus talentos, es una característica fundamental de los grandes líderes, ya que permite a los individuos y equipos relacionar directamente sus contribuciones con la realización del propósito de la organización, lo que genera confianza, pertenencia, orgullo y lealtad dentro de la organización. Los grandes líderes reconocen que cuando las personas se sienten valoradas, dan lo mejor de esfuerzo, y cuando las personas dan lo mejor esfuerzo, el negocio prospera naturalmente. Por eso creo que la excelencia en el liderazgo, no simplemente la habilidad gerencial, es el ingrediente clave que distingue a las grandes organizaciones de las buenas.

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En mi opinión, convertirse en un gran líder es un proceso de aprendizaje que comienza temprano en nuestras vidas y se moldea por todos los entornos, experiencias e individuos a los que estamos expuestos. Para mí, ESADE representa una parte crucial de este proceso, ya que me ayudará a desarrollar un enfoque humanista del liderazgo global a través de sys marcas inigualables – una vision superior, valores fundamentales y un enfoque ético. Su entorno multicultural único me expondrá a compañeros de diferentes nacionalidades y antecedentes, profesores de alto nivel y lideres empresariales justos, quienes me ayudaran a ampliar mi mentalidad global, mi conciencia cultural y mi capacidad para trabajar en equipos multiculturales. El programa me enfrentará a unos desafiós que mejor imitan el entorno al que se enfrentan los líderes globales de hoy – uno de alta presión, controversia, diversidad cultural y gran impacto en numerosos grupos de interés. Esto pondrá a prueba verdaderamente mis características de liderazgo, ya que revelará tanto mis fortalezas como mis debilidades. A lo largo de mi trayectoria personal, algunos de los desafíos mas difíciles también han sido los mas gratificantes, ya que han despertado en mí un sentido profundo de liderazgo. Creo que, a través de mi impulso y determinación para siempre rendir al máximo, la disposición para elegir un camino desafiante hacia el éxito y la pasión por fomentar el aprendizaje y el desarrollo personal, he demostrado mis cualidades de liderazgo no solo en un entorno académico, sino también en el deportivo y profesional. Convertirse en un gran líder es un proceso que requiere un esfuerzo continuo para aprender y crecer. Para lograrlo, uno debe estar expuesto a entornos nuevos, desafiantes y estimulantes. En mi corazón, sé que ESADE y sus riguroso MSc in International Management es precisamente ese entorno para mí – me expondrá a un entorno internacional altamente dinámico, abriría mi mente y ampliará mis horizontes, y en ultima instancia, me obligará a convertirme en mi mejor versión como futuro líder global.